Trabajar el vinilo textil es algo relativamente sencillo y muy agradecido cuando vemos el resultado, pero también es algo en lo que es fácil cometer errores cuando somos novatos (o no). Veamos pues cuáles son esos errores típicos para intentar no repetirlos.
1. No cortar en espejo
Esta es de esas cosas que da igual las veces que hayas cortado vinilo, si vas con prisas seguro que se te olvida. Y es que la mayoría de los vinilos textiles vienen adheridos al transportador y para cortarlo debemos cortarlo «al revés», o lo que llamamos «en espejo» para que al darle la vuelta y colocarlo sobre nuestra prenda, el diseño nos quede «al derecho».
Para solucionarlo mucha gente se coloca un mensaje en la máquina para no olvidarse. Los hay de lo más originales.
2. Planchar sobre la tabla de planchar
Cuando pensamos en planchar, en seguida cogemos la plancha y la tabla de planchar. Pero cuando se trata de planchar vinilo textil, la tabla NO es la mejor superficie para hacerlo. Las tablas de planchar acostumbran a ser agujereadas para que el vapor pueda pasar a través de ella y no se empape. Esos agujeritos pueden quedar marcados en nuestro vinilo y, además, las patas plegables hacen de la tabla una superficie inestable sobre la que no se puede hacer verdadera fuerza.
Para planchar bien nuestro vinilo debemos hacerlo sobre una superficie dura y lisa como una mesa, la encimera de la cocina o ¡incluso el suelo! Normalmente, yo le pongo un trapo o una camiseta vieja debajo para proteger la superficie y mejorar el apoyo de la prenda.
3. Creer que la plancha casera no calienta
La plancha casera puede alcanzar más de 200º perfectamente, una temperatura excesiva para la mayoría de vinilos así que lo mejor es elegir la temperatura de algodón o incluso algo menos, dependiendo del tipo de tela sobre la que queramos pegar nuestro vinilo.
¡Ah! Y recuerda que NO hay que poner vapor. El vapor sirve para quitar las arrugas, pero no va a ayudar en nada a pegar el vinilo.
4. No apretar lo suficiente
La manera más fácil de hacerlo es planchar nuestro diseño por zonas dejando la plancha estática y apoyar nuestro peso sobre ella durante unos segundos. Así nos aseguramos de ejercer suficiente presión. Sin embargo, esto nos puede dejar marcados los agujeros de la plancha en el vinilo y el transportador así que lo que los profesionales recomiendan es mover la plancha en círculos mientras presionamos. De esta manera iremos repartiendo el calor por todo el diseño.
Cuanta más presión ejerzamos mejor se pegará y menos tiempo de planchado necesitaremos. Es importante no pasarnos de tiempo para no quemar el vinilo ni la prenda.
5. Retirar el transportador antes de tiempo
El último fallo típico es querer retirar el transportador con prisa. El proceso de retirado del transportador puede ser algo muy sencillo o algo muy delicado, dependiendo de cuán bien pegado esté nuestro vinilo pero, por norma general, deberemos empezar levantándolo con cuidado por una esquina y no continuar tirando hasta que no comprobemos que nuestro vinilo está correctamente adherido a la prenda.
Si lo planchamos con la plancha casera, mejor dejarlo enfriar un poco antes de tirar para que el adhesivo se endurezca y el vinilo quede bien fijado. Así tampoco nos quemamos.
Si quieres saber algo más sobre el vinilo textil:
- Guía rápida para aprender a utilizarlo
- Post para evitar quemarlo
- Vídeo sobre cómo quitarlo
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